José Azaustre Muro

José Azaustre nace en Málaga en 1929, el día 18 de Junio. Estudia dibujo en la Real Academia de San Telmo en Málaga. Marcha a Madrid, pasa siete años en el Museo del Prado estudiando y copiando a los grandes maestros de la pintura. Sus favoritos son Velázquez, Goya y Sorolla.
Intercala sus estudios con el retrato al natural. Son muchas las personas que se han beneficiado de sus pinceles para vivir más allá del tiempo. Azaustre no sólo capta la imagen sino también el espíritu del retratado.
En el año 1963 marcha a América contratado para pintar retratos de varias personalidades en Puerto Rico, Santo Domingo, Miami y Washington. Su obra gana gran admiración del público y de la Crítica Internacional.
José Azaustre es generoso y desea compartir sus conocimientos. Funda academias de dibujo y pintura en San Juan, Ponce y Mayagüez, Puerto Rico. Es tanta la belleza de esta isla paradisíaca que Azaustre, un artista con gran sensibilidad, queda prendado de ella. Sus paisajes, su gente, su luz, quedan plasmados en sus lienzos. Hace de Puerto Rico su segunda patria, como lo hizo el gran violonchelista Pablo Casals y el insigne poeta Juan Ramón Jiménez.
Realiza ciento cincuenta programas de Arte Televisados, "PINTANDO CON AZAUSTRE", en WIPM (Canales 6 y 3), que abarcan desde el dibujo básico, pintura al óleo, acuarela, arte comercial y escultura; por todo ello obtiene el prestigioso Premio INTRE por ser el mejor programa educativo del año.
Ha realizado murales y esculturas en la iglesia La Piedad, de Isla Verde; en la iglesia San Jorge, en Santurce; en los templos Amork en Ponce y San Juan, todos en Puerto Rico. Pertenece a la Academia de Arte, Ciencias y Arqueología de Puerto Rico.
Es miembro de la Academia Tiberina de Roma (Capítulo de Puerto Rico). En el año 1973, fue nombrado Caballero de la Orden de San Jorge (Carinthia, Italia). Su nombre está incluido en la Enciclopedia de Hombres Ilustres de Puerto Rico y forma parte de la Fundación de Ponceños Ilustres en Ponce (Puerto Rico).
Su obra se encuentra en importantes colecciones privadas y públicas en España, Francia, Inglaterra, Alemania, Australia y América, especialmente en Puerto Rico donde ha residido veintiséis años. Azaustre regresa a España después de mucho ir y venir por los caminos del Arte, instalándose en el Rincón de la Victoria de Málaga donde sigue con su labor docente y entregándose a un maravilloso proyecto de pintura religiosa con la imagen del Cristo Vivo de Azaustre como eje central.

- Cuál es tu vinculación con Alcaudete?
Pues verás, mi madre se llamaba Antonia Muro y mi padre Manuel Azaustre Márquez, los dos naturales de Alcaudete. Mi madre que era muy devota de la Virgen de la Fuensanta, me llevó con pocos meses de edad a la ermita y me ofreció a la Patrona de Alcaudete, para que la Virgen me cubriese con su manto protector y me librase de todo mal. Tengo que decir que a lo largo de mi vida he sentido su protección salvándome la vida milagrosamente.
- Háblanos de tu niñez y de tus comienzos con la pintura.
Mi afición por la pintura y la escultura han sido innatas, nacieron conmigo. Recuerdo como hacía con mi madre figuritas de mazapán y que posteriormente llegué a realizar con barro un gran nacimiento para Navidad. El dibujo también formó parte de mi desarrollo como medio de expresión. Pasaba muchas horas dibujando y coloreando unas pequeñas láminas que mi madre acababa regalando a familiares y amigos. Fue en definitiva una niñez plácida y creativa que culminó a los catorce años cuando me matriculé en la academia de San Telmo de Málaga, donde estuve seis años en dibujo artístico y uno en lineal, sacando sobresaliente con un bonito diploma y premio en metálico de 25 pesetas en cada curso.
Piensa que a los catorce años, después de una guerra y sus consecuencias, eran pocos los que podían pensar en estudiar y pagar una carrera, así es que me tuve que poner a trabajaren una tienda de cuadros llamada “Morganti” y que estaba situada en el centro de Málaga. Empecé como aprendiz y terminé como maestro. En poco tiempo dominé la restauración de cuadros y dibujos grabados en cristal.
- ¿Cómo empezaste con el retrato?
En mi tiempo libre seguía pintando y participando en distintas exposiciones colectivas que organizaba Educación y Descanso. Por esa época tuve mi primer encargo, una amiga de mi madre me pidió que hiciese un cuadro de una imagen del Cristo de Limpias que se encuentra en la Iglesia de San Felipe. El párroco me dio el correspondiente permiso siempre que no fuese en horas de misa, así es que en unos ratos por las mañanas y durante unos días llegué a terminar este primer retrato del natural, que fue muy ponderado por muchas personas que percibían el dolor y la resignación que emanaba del rostro de Jesús dando esto pie a que me hiciesen distintos encargos de cuadros con Vírgenes y otros temas religiosos.
Otro encargo importante para mi fueron dos murales de tres por dos metros que me encargó Obras Públicas para participar en la Feria del Campo de Madrid, a donde asistiría Franco para inaugurarla. Fue un reto para mi ya que solo dispuse de quince días para pintarlos.
- ¿Como decidiste irte a Madrid?
Pues verás, eso fue una decisión al final de mi servicio militar. Estuve voluntario de aviación, en el norte de África, unos dos años y en ese tiempo pude practicar la pintura ya que hice retratos de toda la familia del capitán, Esto me sirvió para afianzarme más en mi idea de dedicarme plenamente a este noble arte de la pintura.
Una vez licenciado intenté lograr una beca que me permitiese subsistir en Madrid pero la cosa no era fácil así es que me tuve que quedar en Málaga otros dos años haciendo retratos y diversos encargos hasta que me armé de valor y con dinero para vivir no más de un mes viajé a Madrid (había logrado reunir ochocientas cincuenta pesetas, unos cinco euros de los de ahora).
Mi caja de óleos y unos cuantos cuadros pequeños me acompañaron en el viaje, encarándome a la aventura con la mayor de las ilusiones. Uno de los primeros lugares que visité fue el Museo del Prado. Me sentí flotar por entre aquellos inmensos salones donde cada cuadro que contemplaba me hacía sentir más y más pequeño. El Greco, Zurbarán, Murillo, Tiziano y sobre todo Velázquez. Cuando me situé ante las Meninas “se me cayeron los palos del sombrajo”. Jamás otro pintor ha sido capaz de captar el volumen, la profundidad, y el espacio entre las figuras. Esa noche soñé con el museo y entre sueños paseé sin descanso sus salas.
- ¿Tus primeras experiencias y cuadros en Madrid?
A los pocos días me salió el primer encargo de retrato, dos mil pesetas les cobré por ser el primero, después vino el segundo y un tercero, que me aseguraron seis meses de vida en la capital. Apuntaba mis gastos en una libretita y procuraba ahorrar todo lo que podía para venirme a Málaga los veranos, pues en Madrid Julio y Agosto son meses flojos para la pintura. En Málaga disfrutaba de la playa y de mi familia, sin dejar de pintar cuadros para mi regreso a la capital en Septiembre.
Aconsejado por varios pintores y por una buena amiga, profesora de arte, ingresé como copista en el Museo del Prado, donde estudié a los grandes maestros, copiando aquellos que más me podían aportar en conocimiento, por supuesto que uno de los primeros que copié fueron las Meninas y otros cuadros de Velázquez.
- ¿Que es para ti el retrato en la pintura?
Es sobre todo el reto más importante al que se puede enfrentar un pintor. Parecido, proporciones y sobre todo la expresión. La parte psicológica juega un papel muy importante. Esa personalidad tan particular que cada uno tiene, hay que captarla, si no se consigue el retrato quedaría incompleto. Para mi cada retrato es un desafío y un estímulo nuevo que me motiva fuertemente, empeñándome en él hasta que logro. Hasta el presente siempre han quedado satisfechos mis retratados, a los que me he entregado por igual, fuesen personalidades, mujeres, hombres o niños.
- ¿Cómo es que decidiste saltar el charco y arribar a Puerto Rico?
Eso ocurrió en el año 1963. Me surgieron varios contratos en la isla para retratar a distintas personalidades, entre ellos a Monseñor Freimiot Torres Oliver, Obispo de Ponce (una preciosa ciudad de Puerto Rico), al doctor Francisco Lluch, al doctor Cordaro, etc.
Me enamoré de la isla, sus paisajes, desde el mar a la montaña, me cautivaron, sus gentes, sus costumbres y su tradición. Allí el que más y el que menos tiene un abuelo español. La herencia española se palpa en el viejo San Juan, en cada esquina, en las iglesias, en sus edificios y parques y sobre todo en su alegría de vivir. Me sentí como en casa y a los pocos días estaba almorzando con el gobernador de Puerto Rico en su casa, Don Luis A. Ferre quien fundó el museo de arte más importante de Centroamérica y el Caribe, y que me convenció para que me quedase como profesor de pintura en la isla. Fundé mi primera academia e impartí varios cursos de pintura en la Universidad de Ponce.
A los seis meses tuve mi primera exposición, que fue todo un éxito. Paisajes, marinas, bodegones, figura y algunos de los retratos a personas destacadas de la sociedad, formaron el conjunto de la exposición. Esta primera exposición fue importantísima para mi.
- Total, que echaste raíces.
Efectivamente, me casé y me establecí en Ponce y desde allí, viajaba por toda la isla cumpliendo con los encargos y realizando exposiciones, en total sesenta y cuatro en un total de veintiséis años vividos en Puerto Rico.
He pintado infinidad de retratos, casi podríamos decir que dos o tres a la semana, bodegones, composiciones de figuras, paisajes, marinas y temas de ballet.
- ¿Los murales, la escultura y los altorrelieves también te han interesado ¿verdad?
Los murales han sido parte de los retos que tenemos que resolver los pintores. Un mural que me enorgullece mencionar es el de la iglesia de La Piedad, situada en Isla Verde (San Juan de Puerto Rico). Mide diez metros por ocho de alto y representa La Piedad. En la misma iglesia me encargaron a posteriori una serie de altorrelieves que componen el Vía Crucis. Todo un año me llevó terminarlo, cada pieza mide un metro de ancho por sesenta centímetros de alto y es único pues incluye al resucitado. Después pinté dos murales en la iglesia de San Jorge, situada también en San Juan, la única iglesia de estilo gótico que hay en la isla. Un mural representa la Oración en el Huerto y el oto la Ascensión de la Virgen al cielo, ambos en el altar mayor.
- ¿Has atendido encargos fuera de Puerto Rico?
Efectivamente, muchos, entre ellos recuerdo los retratos que hice en Republica Dominicana a dos obispos, al director de la Universidad del Este en San Pedro de Macorí, Santo Domingo, Washington, New York e Inglaterra entre otros. Así entre retrato y retrato y exponiendo por toda la isla han pasado veintiséis años de mi vida.
- Volviste a tu Málaga querida, y ¿Ahora qué?
Al regresar a mi tierra me traigo un importante bagaje de experiencia y recuerdos imborrables, habiendo dejado huella en parte de América, sobre todo en Puerto Rico, donde mi labor docente ha sido tan fructífera. Me llena de satisfacción que exista un buen grupo de jóvenes pintores, que pasaron por mis clases, y que llenan las galerías de arte con sus cuadros.
Desde la atalaya de mi vida, construida con los años de experiencia, el sacrificio, la dedicación, los éxitos (no hay rosas sin espinas) y el esfuerzo, he sido feliz dedicándome a lo que más me gustaba. Tengo dos hijos Mª Dolores y José Manuel, dos nietos y una esposa, Hilda Seda de Azaustre, a la cual debo parte de mi vida (la más importante). Ella es mi estímulo y mi acicate, que me impulsa a seguir luchando, la que me levanta cuando estoy caído por la enfermedad… En una palabra, es mi vida.
Hoy cuando mi pelo blanquea, mis limitaciones físicas me obligan a limitar mis horas de trabajo y tengo que alargar el tiempo de ejecutar un cuadro, siento añoranza de ese tiempo en el que era incansable.
Aun me queda el entusiasmo y las ganas de pintar, pues en estos momentos estoy realizando los cuadros que tenía proyectados desde hace mucho tiempo; espero que si Dios me ayuda, pueda verlos terminados. Con ellos quiero dar gracias y gloria a Dios por este don recibido
- ¿Tendrás otras aficiones aparte de la pintura?
Por supuesto, la música juega un importante papel en mi vida, pinto siempre escuchando a Mozart, Chopin, Beethoven, Bach, que subliman mi espíritu mientras trabajo. Me encanta leer y cultivarme. Actualmente y como complemento a mi proyecto pictórico me estoy documentando sobre la vida y el mensaje de Jesús. Mi último libro es La vida de cristo de Fulton J. Sheen.

Hasta aquí esta entrevista, que se ha hecho esperar pero que esperamos lleve al lector de Sierra Ahíllos a conocer bien a este ilustre pintor, oriundo de Alcaudete, con una calidad humana fuera de lo común, generoso y simpático, gran desconocido en nuestro pueblo, que es el suyo, y del que esperamos con ilusión que sea capaz de llevar a buen puerto ese maravilloso proyecto que parte de la imagen del Cristo Vivo de Azaustre, imagen que es capaz de retratar una y otra vez, sin fijarse en ningún modelo, con distintas expresiones y actitudes, pues se encuentra dentro de su mente y con el que se siente en permanente comunión cuando pincel en mano se encara al lienzo blanco y limpio.

TODOS LOS CUADROS QUE ESTAN EN ESTA SECCIÓN SON UNA PEQUEÑA MUESTRA DE UNA EXPOSICIÓN DE TIPO RELIGIOSO EN PREPARACIÓN...

EXPOSICIONES COLECTIVAS
1945 Sociedad Económica Amigos del País, Málaga.
1946 Educación y Descanso, Málaga
1947 Frente de Juventudes, Málaga.
1948 VI Exposición de Arte Educación y Descanso, Málaga
1949 Torremolinos, Málaga.
1950 Murales Ejército, Tetuán.
1954 Peña Montmatre, Pimpi, Málaga.

EXPOSICIONES COLECTIVAS (ÚLTIMOS AÑOS)
- Gobierno Civil de Málaga (Veintisiete Pintores Malagueños)
- Salón de Otoño. Galería Nova Málaga
- Salón de Otoño. Galería Porticus. Galería. Málaga
- Galería Hilda. Málaga
- Galería XAUEN. Granada

EXPOSICIONES INDIVIDUALES
1960 Sociedad Económica Amigos del País, Málaga.
1961 Torremolinos, Málaga.
1962 Casa de Málaga, Madrid.
1963 Galería Infantas, Madrid.
1964 Hotel Meliá Ponce, Puerto Rico.
1964 Club de Leones, Ponce, Puerto Rico.
1964 Funda la Academia de Dibujo y Pintura, Ponce, Puerto Rico.
1965 Banco Popular, Ponce, Puerto Rico.
1966 Galería Ferrari, San Juan, Puerto Rico.
1966 Galería Casa del Arte, Puerto Rico.
1967 Galería Ferrari, San Juan, Puerto Rico.
1967 Galería Cruz, San Juan, Puerto Rico.
1967 Hotel Ponce Intercontinental, Puerto Rico.
1968 Museo de Ponce, Puerto Rico.
1968 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1969 Hotel Meliá Ponce, Puerto Rico.
1970 Universidad de Arecibo, Puerto Rico.
1970 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1971 Hotel Montemar, Aguadilla, Puerto Rico.
1971 Hotel Ponce Intercontinental, Puerto Rico.
1971 Club Internacional de Prensa, Madrid.
1972 Galería Casa del Arte, San Juan, Puerto Rico.
1972 Galería Universidad, San Juan, Puerto Rico.
1973 Hotel Ponce Intercontinental, Puerto Rico.
1974 Casa de España, San Juan, Puerto Rico.
1974 Universidad Regional Ponce, Puerto Rico.
1975 Banco Popular Ponce, Puerto Rico.
1976 Hotel Dorado del Mar, Puerto Rico.
1976 Hotel Condado Hollyday Inn, Puerto Rico.
1977 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1978 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1979 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1980 Grabaciones Televisión, Programas de
1980 Dibujo y Pintura Canales 6 y 3, San Juan, Puerto Rico.
1981 Mural iglesia La Piedad, Isla Verde, Puerto Rico.
1982 Esculturas alto relieve. Vía Crucis, iglesia La Piedad, Isla Verde, Puerto Rico.
1983 Murales y Esculturas Templo (Amorc), Ponce, Puerto Rico.
1985 Galería Andrés, San Juan, Puerto Rico.
1985 Caguas Federal, Puerto Rico.
1986 Galería Andrés, San Juan, Puerto Rico.
1987 Hotel Mayaguez Hilton, Puerto Rico.
1988 Murales Templo (Amorc), San Juan, Puerto Rico.
1989 Murales Iglesia San Jorge, San Juan, Puerto Rico.
1990 Galería Porticvs, Málaga.
1991 Galería Corte Inglés, Málaga.
1991 Galería Casa de Cultura, Nerja.
1992 Galería Porticvs, Málaga.


EXPOSICIONES INDIVIDUALES (ULTIMOS AÑOS)
- Galería Excmo. Ayuntamiento de Nerja.
- Galería Hilda. Málaga
- Galería Xauen. Granada
- Caguas Federal, Caguas. Puerto Rico.
- Banco Santander. San Juan. Puerto Rico.
- Hotel Mayagüez. Hilton. Mayagüez. Puerto Rico.
- Destilería Serrallos. Ponce. Puerto Rico.
- Puerto Rican. Cement Co. Ponce. Puerto Rico.
- Hotel Meliá. Ponce. Puerto Rico.
- Hotel Ponce Intercontinental. Ponce. Puerto Rico.
- Thom Mean Co. Ponce. Puerto Rico.
- Hospital Dr. Pila. Ponce. Puerto Rico.
- Hospital San Lucas. Ponce. Puerto Rico
- Casa Fuerte Bezmiliana. Rincón de la Victoria

COLECCIONES E INSTITUCIONES DONDE FIGURAN SUS OBRAS


- Monseñor Rodena, Obispo de Almería. Obispado de Almería.
- Ayuntamiento de Nerja.
- Ayuntamiento del Rincon de la Victoria.
- Cofradia Del Cautivo, Cofradia de la Veronica, en Málaga.
- Universidad del Este y Obispado (Rep.Dominicana).
- Monseñor Torres Oliver, Obispo de Ponce. (Puerto Rico).
- Universidad Católica de Ponce. (Puerto Rico).
- Universidad Politécnica de San Germán. (Puerto Rico).
- Colegio de Ingeniería y Agricultura de. Mayagüez (RUM). (Puerto Rico).
- Colegio Percy. Ponce. (Puerto Rico).
- Ayuntamiento de Ponce. (Puerto Rico).
- Iglesia La Piedad. Isla Verde. (Puerto Rico).
- Iglesia San Jorge. Santurce. (Puerto Rico).
- Templo Amork. San Juan. (Puerto Rico).
- Templo Amork. Ponce. (Puerto Rico).
- Banco Obrero. Ponce.(Puerto Rico).
- Banco Popular. Ponce.(Puerto Rico).
- Colegio de Mayaguez.(Puerto Rico).
- Universidad de San Germán.(Puerto Rico).
- Colegio Percy, Ponce (Puerto Rico).
- Museo Serralles Ponce(Puerto Rico).
- Glen H. Coperland. California. (EEUU)
- Joseph Trachta. New Jersey. (EEUU)
- Dr. John Lasick. Ohio.(EEUU)
- Dr.Pabon,Washington, (EEUU)
- etc., etc.


CRISTO VIVO DE AZAUSTRE

La gran variedad temática en la obra de este malagueño dice de su sólida formación artística para abordar con soltura y éxito, desde los temas florales al retrato, desde los temas urbanos a los campestres, desde las naturalezas muertas a la vitalidad de las bailarinas.. En todos ellos, Azaustre, triunfa plenamente por su dominio del dibujo, de la composición y del oficio, y en posesión y dominio de esta tridimensión - que completa con la más variada gama del más diverso colorido, con sus luces y sombras bien proporcionadas-, el artista logra la perfecta congruencia entre terma y realización, entre sueño y realidad, entre ambición y resultado.
En la actual exposición parece querer marginar su condición de estupendo retratista que tan demostrado y reconocido tiene. Ha preferido que contemplemos el romántico clima que late en los niños jugando con palomas; la ternura maternal de una triangular y bien resuelta composición; las largas y definitivas pinceladas que conforman las carnaciones, a contraluz, de sus escultóricas bailarinas; las blancas y floridas calles de Frigiliana, en las que la luz mediterránea penetra, acuchillando la frescura de las sombras; los bodegones, de excelente realización, con definitorios regustos clásicos y factura academicista; los cortijos, las barcas y los jazmines... esos deliciosos búcaros desde los que nos embriaga el perfume de nuestra más genuina flor.
Juan B. de Ocaña y Ocaña
Académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo

Azaustre es un pintor encaprichado con la poesía de las formas. De ahí que la extraordinaria seducción de su mundo de colores esté hecho a base de intuiciones; de una especial sensibilidad para transformar en belleza las realidades que elige.
A medio camino entre el preciosismo clásico y el impresionismo primitivo —aquel emergente que se enamoró de la estética y precedió al esteticismo— esta pintura es un alarde de matizaciones inconfundiblemente subjetivas.
Azaustre ama el color. Por eso lo mima, lo trabaja con ternura, lo amalgama sin estridencias en suavidades interminables. Y el color, el más rebelde de los elementos, se deja querer en sus manos, se le "dociliza" de mil maneras tonales, creadoras de espacios, de volúmenes, de emociones... Pero a mi manera de ver, donde la pintura de Azaustre se peculiariza en encantos y sugerencias es en la figura femenina. Ahí el pintor encuentra un universo de levedades e insinuaciones, de trazos y movilidades, que salen del argumento de la plástica y entran en la órbita de la psicología. Mediante un calculado y espléndido diseño, casi en las fronteras del manierismo.
Azaustre hace decir a sus figuras elocuentes expresiones corporales, carentes de artificios, en líneas de atrayente sencillez.
Luego el catálogo se extiende en composiciones costumbristas protagonizadas por la luz. Luz total, avasallante, mediterránea... Y en bodegones donde el sol es apenas un brillo descriptivo, auxiliar.
En fin, la extraordinaria versatilidad del artista impiden atrapar la totalidad de su obra en los márgenes necesariamente escuetos de una presentación.
Digamos que es un narrador de encantamientos que ha conseguido sintetizar el frescor juvenil de su pintura con la madura serenidad de su experiencia.
José Luis Navas
Crítico de Arte "Diario 16 de Málaga"
y Director de Radio Nacional de España en Málaga

Para hacer el elogio que merece bastará decir que es la pintura realista más autorizada que hemos visto en los últimos tiempos. Cuadros de magnífica soltura en los que la técnica, el dibujo y el color juegan un papel importantísimo. Equilibrados, llenos de empaque y jugosidad, de gran sabiduría y extraordinaria belleza. Cuadros en los que los elementos naturales, flores, paisajes, bodegones y figuras, sirven para recrear el espíritu.
L. Caballero
Crítico de Arte

Como estudiante y como pintor, comprendió Azaustre la necesidad de una identificación plena con el oficio, para que la paleta y el pincel pudiesen darle amplia cabida a las exigencias de la inspiración. Si he de hablar como poeta, admiro la paleta de este artista genial como expresión de un sentir que a mí mismo se me escapa en la palabra; admiro la perenne lección de sus lienzos armoniosos.
José Mª García Rodríguez
Escritor Abogado
Canciller Consulado de España, Puerto Rico

José Azaustre Muro en España, donde nació y se educó, y en Puerto Rico donde dispensa a nuestro pueblo lo mejor de su arte pictórico no necesita presentación.
Es conocido familiarmente como "El Retratista" ya que son muchísimos los que se han beneficiado de su pincel para vivir más allá en el tiempo a través de una tela destinada a recalcar, no solo la imagen, sino también -como pocos saben hacer con su maestría- el espíritu del retratado.
Los cuadros de Azaustre Muro revelan un arte personal que no se puede catalogar con ninguna de las corrientes del presente. Es una mezcla virtuosa de colores y de intuiciones, de luces y de realidades que le han ganado la admiración, el respeto del público y de la crítica internacional más exigente.
Sus obras han sido exhibidas en numerosos países de dos continentes y ya - por la particular técnica de su ejecución- son objeto de atento estudio, ganándole una activa demanda que en estos últimos años lo obligan a viajar intensamente y a producir muchísimo.
Artista en el alma, y por lo tanto, sensible y generoso, ha sentido la necesidad de ceder al deseo de nuestra gente y -renunciando a su cotidiano descanso- ha aceptado dirigir en San Juan y en Ponce dos Academias de Enseñanza Artística.
Azaustre Muro es un óptimo artista sobre todo porque es un hombre bueno, optimista, seguro de sí mismo, que sabe vivir su vida con entusiasmo, con profundidad de sentimientos.
Es generoso: sabe compartir lo suyo con el impulso del niño que todavía tiene intactos los dones del Creador.
Por sus obras de bien, por su alto prestigio en nuestras comunidades, por su hidalguía, la prestigiosa Soberana Militar Orden de San Jorge en Carintia hace tiempo que lo ha nombrado Caballero.
Su fama de pintor, su valentía de retratista, su excelencia didáctica han sido también reconocidas en Italia, el Centro Mundial del Arte. En 1973 la Academia Tiberina de Roma lo ha nombrado Académico correspondiente, título y funciones que se otorgan sólo a personalidades de reconocidos méritos.
Dr. Philip Cordaro
Presidente de la Academia Tiberina de Roma.
Capítulo de Puerto Rico.

En José Azaustre Muro, se logra una difícil adecuación plenamente lograda entre la técnica y el contenido. Nuestro pintor es un virtuoso de las formas, capta a cabalidad el mundo de las superficies; pero esta captación lleva en sí la expresión del mundo interno de los objetos, que nuestro artista tiene ante sus ojos.
Pocas veces en el ámbito de la plástica se ha logrado esta conjunción. Se dio en Velázquez, en Tiziano, en Ribera y en Goya, quienes además de captar fotográficamente lo observado, lo cargaron de una fuerza subjetiva personalísima, la fuerza que cada cosa en sí tiene. ¡Cómo alienta el alma del paisaje puertorriqueño, el sentido aparentemente inerte de la naturaleza muerta en los lienzos de este clásico que es Azaustre! ¡Cómo aprehende con fulgor inusitado el alma de cada uno de los modelos! Considero que José Azaustre Muro, es uno de los retratistas más destacados de la pintura hispánica actual. Véanse a manera de ejemplo los siguientes retratos: el de S. E. Monseñor Fremiot Torres Oliver, digno de la paleta de un Velázquez; el del poeta Félix Franco Oppenheimer, de trazo suelto, de composición ligera y circular en que, en el centro del lienzo, los ojos fulgen como en las composiciones de Goya; el del Dr. Tito Mattei Semidei y el del Dr. José Portuondo y De Castro; trabajos todos en que puede observarse el justo equilibrio entre la captación de las superficies, que ya apuntamos, y el sentido vivo, dinámico, del complejo mundo subjetivo.
Me honro en escribir estas líneas para esta exposición en que se evidencia un nuevo estadio en la sensibilidad de este andaluz de Puerto Rico, que se llama José Azaustre Muro.
Dr. Francisco Lluch Mora
Escritor, Poeta
Catedrático Universidad Católica de Puerto Rico

El pintor José A. Azaustre Muro forma parte de una selecta élite de artistas extranjeros que habiendo llegado de visita a nuestra patria, enamorados de su belleza y hospitalidad, han constituido en ella su hogar.
Además de artista es Azaustre maestro. Su amor a la belleza no se satisface con poseerla y reflejarla en su obra, sino que pretende además comunicarla en el salón de clase. Afirma el Honorable Arturo Cintren García, exalumno de Azaustre, que con su entusiasmo, pasión y sensibilidad artística busca" mantener encendida la hoguera del amor al Arte", en sus alumnos.
En el realismo de sus bodegones, de sus paisajes o de sus retratos palpamos un idealismo que expresa algo más que la pura realidad objetiva, recordándole al espectador las palabras del filósofo Vasconcelos: "Las analogías que descubre el arte, obedecen siempre a la ley luminosa y perfectamente orientada de la belleza; hacia las formas superiores del ser".
Dr. Francisco J. Carreras.
Presidente Universidad Católica de Puerto Rico.
Director Fundación Ángel Ramos. Puerto Rico.

José Azaustre es un enamorado de la vida, fuente para él de inagotable belleza. Sus lienzos son testigos de que todo es luz y armonía. Para Azaustre hasta de un ave, el vuelo, es sonido de vida y mundo de esperanza.
El encanto del ballet, ha subyugado a Azaustre y pone a prueba su dominio de la figura humana. Une la gracia de movimientos que nos hace sentir la cadencia de maravillosos sonidos y las figuras que dejan tras de sí la estela única y etérea que desde tiempos inmemoriales ha acompañado sonoramente al ballet; un arte prisionero en los lienzos de Azaustre.
En esta exposición, Temas de Ballet, une la gracia de movimientos, que nos hace sentir las cadencias de maravillosos sonidos, y las regias figuras que dejan tras sí la estela única etérea, que desde tiempos inmemoriales ha acompañado sonoramente al Ballet.
William Sarazen
Director Puerto Rico School of Ballet

MURALES,
ALTORELIEVES
Y ESCULTURAS...